El panel de "Estrategias para aportar biodiversidad a los sistemas productivos", que se llevó a cabo en el XXV Congreso Aapresid, abordó el rol social que tienen los productores en el mantenimiento de los agroecosistemas y la biodiversidad.
El encargado de abrir la disertación fue Santiago Poggio (IFEVA), quien explicó que "los agroecosistemas sostienen la biodiversidad que provee servicios a la sociedad, y principalmente a los agricultores, porque sostienen la actividad agropecuaria" y señaló que es clave conservar la biodiversidad, por eso mismo, por los servicios que brinda. "La idea es sostener la producción, los agricultores y la sociedad agropecuaria, para que sean custodios de esas funciones ecológicas. Custodios de la biodiversidad".
"Una parte importante de la biodiversidad que pretendemos conservar está en los márgenes de los cultivos, están en las zonas que no se utilizan para la producción como en los alambrados, caminos y rutas, en los corrales, en las taperas entre otros; esos son los ambientes en los que debemos poner
foco".
Por su parte, Fernando Salvagiotti (INTA), ahondó en la importancia que tienen "las rotaciones de cultivos como estrategia para aportar biodiversidad, por ser una forma de manejar y mejorar los ecosistemas". En rigor, destacó que la intensificación sustentable es equivalente a producir y generar ecosistemas "haciendo un uso eficiente de los recursos lo que deriva en incrementar la biodiversidad".
Entre algunos beneficios que otorga el ecosistema, Salvagiotti
recordó "provisión, previsión, regularidad, entre otros".
Por este motivo, es que "realizamos Ensayos de Larga Duración (ELD) para lograr detectar cuantitativamente la biodiversidad que brinda este tipo de procesos, es decir la rotación tiene efectos positivos sobre los cultivos reduciendo procesos de contaminación como óxido nitroso", explicó.
En una nueva rotación, es imperioso "ver la oferta de recursos, identificar los mercados potenciales, incorporar servicios ecosistémicos, arreglo temporal y espacial de los cultivos, realizar simulación de producción, porque es necesario buscar el Trade Off", aconsejó el investigador.
Al respecto, Miriam Barraco (INTA), comentó algunas experiencias en Argentina con los cultivos de cobertura y cómo colaboran en la biodiversidad.
"Buscamos cubrir suelos con cultivos de cobertura y conservar la materia orgánica" dijo y afirmó que cada vez hay más cultivos de cobertura en distintos ambientes, sobre todo de centeno y avena, aunque resaltó que "estamos teniendo excesos hídricos como uno de los principales inconvenientes que debemos combatir de forma organizada y seria".
Barraco, subrayó que en el mundo se "están llevando a cabo cultivos de cobertura mixtos con multi especies, pero es algo que todavía es experimental en nuestro país".
"Este tipo de cultivos aportan más de 20 beneficios, como la disminución de las malezas, permitiendo un control más férreo de las mismas" destacó. Sin embargo, también dejó en claro para concluir que "el cultivo de cobertura incrementa la biodiversidad, pero no reemplaza en totalidad los beneficios de una adecuada rotación".