Organizado por la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres -EEAOC- y con el apoyo del INTA, del Ministerio de la Producción, los grupos CREA, el Colegio de Ingenieros Agrónomos y la Facultad de Agronomía y Zootecnia de la Universidad Nacional de Tucumán, tuvo lugar en la Sociedad Rural de Tucumán un encuentro sobre las producciones estivales: soja y maíz, el cual estuvo centrando en tres ejes: sustentabilidad del suelos; manejo de cultivos, según variedades, plagas y manejo de maquinarias; y el clima.
En la oportunidad, el director técnico de la EEAOC, Daniel Ploper junto al responsable de la Sección Granos de la institución, Mario Devani, reconocieron la importancia del mismo como una verdadera herramienta académica, en apoyo de los productores locales que se aprestan a trabajar sus campos durante el presente período estival.
En el mismo, por ejemplo, se puso el acento en el manejo de cultivos, las variedades más usadas y el control de plagas. En este último punto y ante la gran variedad de males que afectan a la soja, se hizo hincapié fundamentalmente en el principal enemigo de lo últimos años: el "picudo negro", un escarabajo que afecta sobremanera al cultivo.
Asimismo, lo expertos insistieron en la necesidad de trabajar fuertemente en la sustentabilidad de los suelos. En tal sentido, destacaron nuevamente la importancia de la rotación de cultivos a fin -más ahora que se habla de mayor demanda mundial de maíz- de preservar el valor del suelo. "Queremos que los agricultores de la región se acostumbren a intercalar la producción de soja con maíz o con garbanzos, que representan alternativas muy rentables y ayudan al cuidado del suelo. Buscamos que se logre una producción socialmente responsable y ambientalmente sustentable, mirando el futuro mediato e inmediato", indicaron.
En el plano de la sustentabilidad, Devani sostuvo que quedó claro en el encuentro, que se deben intensificar los cultivos utilizando los 400 milímetros de agua que requieren, obteniendo la máxima productividad posible, y con los milímetros que nos puedan llegar a quedar, realizar un cultivo invernal para producción o para cobertura, de manera que el suelo se encuentre activo todo el año. Así se podrá aumentar el rastrojo y las raíces, ayudando al mismo tiempo a aumentar la actividad microbiana del suelo. "Si logramos aumentar la macro y micro-porosidad del suelo, podremos aumentar la captación del agua de lluvia, disminuir el escurrimiento superficial y lograr un balance positivo de la relación carbono nitrógeno".
En ese contexto, se dieron a conocer los resultados de la campaña 2011 elaborado por el Programa Granos de la EEAOC que se realiza indefectiblemente desde hace 14 años sobre evaluación de cultivares de soja en macro-parcelas en el noroeste argentino.
"El objetivo no es otro que hacer conocer como fue el comportamiento de las variedades de soja en los diferentes ambientes en el norte del país. De esta forma, se obtiene información valiosa a la hora de evaluar los diferentes materiales que se encuentran a escala comercial, y orientar a los productores, técnicos y asesores vinculados al cultivo de soja, la elección para la próxima campaña de los cultivares que mejor se adapten a una determinada zona y a sus características particulares".
Para lograr la conclusión final, el programa testea las distintas variedades de soja en 15 localidades representativas de ambientes diferentes de toda la región distribuidas en las provincias de Tucumán, sudeste de Catamarca, el oeste de Santiago del Estero y Salta.
Entre los análisis realizados para la presente campaña, se destacó lo siguiente:
Grupos de maduración: Los diferentes grupos de maduración (GM) que se siembran en la región NOA pueden presentar comportamientos similares ó diferentes entre ellos; siendo las condiciones ambientales de cada campaña un factor importante en el desempeño. Es por ello que para cada año, y de manera comparativa con campañas anteriores, se realizan análisis de rendimientos promedios de los distintos grupos evaluados en las localidades antes mencionadas.
Para obtener rendimientos promedios de cada GM, se consideraron todas las variedades de cada grupo que fueron sembradas. Luego, se asignó un valor de 100% al GM que alcanzó la media más alta, mientras que los demás grupos tomaron un valor relativo al de mayor rinde. Por eso, para la campaña 2010/2011, se puede observar que los rendimientos promedios de los distintos GM, se encuentran entre los más elevados de las últimas 12 campañas agrícolas para la región NOA. Los GM más largos fueron los que alcanzaron los rendimientos porcentuales más altos del 100 por ciento (GM VIIII), seguidos de las variedades de GM V y VI (97 y 95 por ciento respectivamente), mientras que las variedades de GM VII mostraron rindes cercanos al 92 por ciento. Asimismo se destaca el grupo madurativo VIII, como el más estable de los últimos años. Alcanzando el valor porcentual del 100 por ciento en 9 de las 12 campañas analizadas.
En conclusión, en la campaña 2010/2011 los rendimientos promedios obtenidos para los diferentes grupos madurativos evaluados, estuvieron entre los más altos de los últimos años, destacándose los rendimientos de las variedades VIII mientras que los materiales de mejor comportamiento fueron: NA 5909, DM 5.8, RA 516, DM 5.9 (GM V), DM 6500, NS 6448, DM 6.8 (GM VI), DM 7.8, NA 8004, TOB 7800, Yanasu, RMO 805 y DM 8002 (GM VIII). "Los análisis y recomendaciones puestas a consideración constituyen una de las herramientas empleadas por los productores y técnicos para la elección de los cultivares que utilizarán en la próxima siembra", se indicó.
En cuanto a las perspectivas climáticas para la campaña que se inicia, dijeron que hay indicios de que será benevolente durante los meses de diciembre a marzo, inclusive, con buenas lluvias y con cortos períodos de secas.
Para apoyar esta conjetura, se basaron en lo dicho por especialistas en meteorología que hablan de un cambio climático. "A partir del año 2003, la PDO (Pacífical Decadal Oscillation) cambió de rumbo en su tendencia y el Océano Pacífico se tornó más frío. Eso genera mayor frecuencia de aparición de eventos conocido como "La Niña" con sequías principalmente en la Pampa Húmeda, en lo que hace a la Argentina".
Pero como la predicción climática está llena de incertidumbre, pues para la primavera austral hay pronósticos de lluvias normales para la Argentina según la NASA, otra institución norteamericana el IRI-USA, sostiene que habrá importantes sequías en la Pampa Húmeda durante los meses de verano.
A nivel local, un trabajo realizado por el Laboratorio Climatológico Sudamericano, pronosticó por caso, el cese de La Niña y la instalación de un proceso de calentamiento de las aguas superficiales en el Océano Pacífico Ecuatorial. Eso traerá buenas condiciones climatológicas para el desarrollo de cultivos en las provincias del Norte argentino, beneficiando a unas u otras entre los dos principales trimestres de la primavera y del verano. Las zonas más favorecidas serían el Sur de Jujuy, el Este de Salta, el Sur de Santiago del Estero y el Norte de Tucumán. Aunque en toda la región se ve una buena oportunidad para las lluvias sobre el mes de diciembre 2011 y enero 2012, lo que permitiría llevar a cabo con éxito la campaña de granos.
En definitiva, para esta campaña se esperan menores precipitaciones en la zona núcleo del país y precipitaciones dentro de lo normal en el NOA, acompañadas por períodos cortos de seca. Pero en general las condiciones ambientales serán buenas. Por último, hubo un espacio también para hablar sobre maíz y ahí se puso en relieve un informe del Proyecto Maíz de la EEAOC con los resultados de la "Red de Macroparcelas de Híbridos de Maíz de la Campaña 2010-2011 en Tucumán y sus zonas de influencia".
La información logró caracterizar a los distintos híbridos participantes en la última campaña a través de un análisis comparativo de sus rendimientos, su aptitud agronómica, los registros fenológicos, el comportamiento frente a plagas y las enfermedades, como así también la humedad a cosecha.
Tras el análisis, se obtuvo una idea clara del potencial de rendimiento, siendo los híbridos DK 747VT3Pro y 30T17Hx, de Monsanto y Pioneer, respectivamente, los que demostraron altos valores de rendimiento en la mayoría de los ambientes evaluados, con valores de frecuencia del 78 y 75 por ciento.
Desde la Sección Maíz se resaltó además el comportamiento de los híbridos que superaron el valor de frecuencia del 50 por ciento: DK 390HxRR (Monsanto), NA 6317TDMax (Syngenta), Syn 128TDMax (Syngenta), los tres con 56 por ciento; y al material 30F35Hx (Pioneer) con 50 por ciento.
Asimismo, se indicó que hoy en día se cuenta con materiales de alto potencial de rendimiento, lo que da la posibilidad al productor de maíz de elegir el híbrido que mejor se adapte a su ambiente.