RIEGO: CON PRECAUCION
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El agua es fundamental para el crecimiento de las plantas; en los cultivos extensivos está provista por las lluvias, y son las condiciones agroecológicas del lugar las que hacen que ciertos cultivos se desarrollen en un determinado ambiente.
En cultivos intensivos, en zonas marginales y últimamente en cultivos extensivos se aplica el riego
como factor de incremento de la producción. No todos los cultivos en todas las tierras agrícolas del
mundo se pueden regar.
Para poder regar debe existir agua en cantidad y calidad suficiente y tierras con aptitud para el
riego, y además el costo del milímetro a aplicar debe ser compensado por el incremento de la
cantidad-precio del producto a cosechar.
Si no se da esta simple ecuación, o si se da y por cualquier razón se produce un desbalance, el
riego es inapropiado en un lugar.
En general se riegan cultivos extensivos de alto valor como papa, pimiento, etcétera.
Los cultivos de granos (soja, maíz, sorgo, trigo) se pueden regar, pero están expuestos a variaciones en la
relación insumo-producto. Son muy sensibles a estos cambios.
Un incremento en el gasoil, por ejemplo, encarece el flete de los insumos que se necesitan y de
los productos que se venden y encarece también el riego porque la mayoría de las bombas y
motores usan este combustible para funcionar. Esto tiene mayor incidencia cuanto más alejada
esté una zona de los puertos.
La relación insumo/producto muchas veces hace que grandes equipos e inversiones estén
paradas, perdiendo la amortización y otros costos, y desalentando la producción.
La mano de obra, la atención y servicios que debe ser de excelencia y hace que muy selectas
áreas se puedan regar, otras desaparecen porque algún factor de los mencionados no llega en el
momento oportuno para que grandes equipos operen eficientemente. Cuando se riegan zonas
áridas y semiáridas se fuerza inútilmente al ambiente natural a producir en condiciones que aún
regando no lo puede soportar. Los especialistas en incorporación de tierras de la FAO indican que
cuando se quiere realizar un doble cultivo en una zona marginal, por ejemplo trigo o cártamo en
invierno y soja o maíz en verano en el mismo lote o maíz de primavera y soja en el mismo lote,
con riego, también se necesitan altísimas dosis de fertilizantes, pero el suelo no soporta el doble
cultivo por mucho tiempo.
No hay efecto buffer, solución tampón ni los carrier necesarios para soportar semenjante uso
intensivo, y si se lo quiere hacer artificialmente es antieconómico. El suelo de estas zonas no está
preparado, ya que, junto con el agua surge por proceso de miles de años, y no se puede modificar
fácilmente, por lo tanto la naturaleza toma su revancha al poco tiempo y estas áreas quedan fuera
de cultivo generalmente por un incremento en los costos de producción.
Este dinero, bien programado se podría haber afectado a producir en condiciones de
sostenibilidad.
En referencia a la provincia de Tucumán, aún faltan estudios completos, pero en una primera
aproximación se puede inferir que solo una pequeña franja de tierras del pedemonte y cercanasa
él pueden regarse; allí están los mejores suelos de la provincia y el riego podría ser usado como
complemento para la producción, además hay mayor probabilidad de coseguir agua de calidad.
Cuando se habla de riego se hace referencia al riego por pozo, agua bombeada desde
profundidades y con equipos de aspersión.
El resto de la zona, y especialmente hacia el este, comienza a presentar la labilidad, fragilidad de un sistema impropio para ser regado. El agua y el suelo pierden calidad rápidamente y el esfuerzo de montar sistemas sostenibles, es antieconómico. Y este es el punto de mayor conflicto, a veces el sistema puede cerrar los
números, puede dar valores de TIR buenos, o de cualquier otro indicador económico de
factibilidad del proyecto, pero por corto tiempo. Analizando a largo plazo no puede funcionar, salvo
artifializando todos los ambientes y sobre ambientes artificiales el costo es imposible de sostener
en el tiempo.
En este punto los organismos técnicos, los asesores, las empresas vendedoras de insumo y los
bancos es donde tienen que sincerar las recomendaciones y no hacer caer a los productores en
falsas expectativas.
Ing. Luis E. Vicini
Jefe Agencia de Extensión Rural INTA
Banda Río Salí - Tucumán
FUENTE: CLARIN RURAL 14/09/96
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