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Control del minador de la hoja de los cítricos En vivero y preplantación  |
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Phyllocnistis citrella representa una de las principales plagas de los cítricos en nuestra región. Las especies más susceptibles que se mencionan en la literatura son pomelo, limón, mandarina, lima y naranja. Ataca principalmente las hojas de brotes tiernos aunque también puede afectar tallos y frutos cuando la densidad poblacional es elevada. A medida que las hojas crecen y se endurecen los tejidos, dejan de ser atractivas para la plaga. La hembra ovipone entre 20 y 80 huevos ubicándolos próximos a la nervadura central, en forma aislada, en el envés de hojas nuevas menores a 1cm de longitud. Cuando la hoja está totalmente desplegada, puede colocarlos en ambos lados y en cualquier sector de la lámina. Las plantas en vivero y las plantaciones jóvenes son las más afectadas ya que brotan con mayor frecuencia que las plantas adultas permitiendo el desarrollo de contínuas poblaciones del minador. Por otro lado, un ataque severo de la plaga puede alterar la estructura de la planta además de retrasar en forma considerable su crecimiento. Las medidas de control a considerar frente a un ataque del minador dependerán principalmente de la edad de las plantas y de su estado de brotación. En viveros, el control debe iniciarse cuando se observan las primeras larvas recurriendo a aplicaciones foliares o tratamientos al suelo de plantas en macetas. Para las aplicaciones foliares se pueden emplear activos de diferentes grupos como inhibidores de quitina (flufenoxuron, lufenuron, novalurone), reguladores de crecimiento (metoxifenocide) y tóxicos nerviosos (abamectin y spinosad). En todos los casos se logra una protección de aproximadamente 12 días sin que exista una diferencia de control importante entre los activos. Cabe destacar que los brotes que emergen luego de la aplicación carecen de protección contra el minador. Se recomienda rotar los ingredientes activos en las diferentes pulverizaciones para evitar el surgimiento de posibles problemas de resistencia. Esta rotación debe contemplar el uso de productos con distintos modos de acción en la planta (de contacto, translaminar y sistémico) y principalmente sobre la plaga (sistema nervioso central, procesos de muda, etc.), acompañados siempre con aceite emulsivo como adherente. El tratamiento al suelo de plantas en maceta consiste en la aplicación de productos de acción sistémica como imidacloprid (0,3 a 0,5 cc por planta) o tiametoxan (0,3 a 0,5 gr por planta) diluidos en un volumen de agua determinado regando las plantas con esta preparación. El período de control supera los 100 días posteriores a la aplicación de productos. El tratamiento de preplantación consiste en la aplicación de una dosis mayor de alguno de los dos productos sistémicos antes mencionados (1 cc ó 1 gr, respectivamente) 5 días previos a la plantación, luego se procede al descope de la planta. El período de control alcanzado es superior a los 100 días. Es importante destacar la ventaja de este sistema de aplicación debido a que las brotaciones no son uniformes y de esta manera se evitan escapes o fallas en el control por falta de oportunidades de aplicación, especialmente en nuestra región donde el ataque del minador coincide con el período de lluvias y no siempre es factible pulverizar en tiempo y forma.¤ |
| Por: H. Salas, L. Goane, A. Macián, A. Casmuz y S. Medina E-mail: zoologia2@eeaoc.org.ar |
